Saltarse comidas regularmente puede provocar un metabolismo lento, deficiencias nutricionales, mayor riesgo de comer en exceso, alteraciones hormonales y problemas digestivos o mentales.
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| Saltarse las comidas de forma incorrecta perjudicará su salud. (Fuente: Getty Images) |
El ayuno es un método ampliamente utilizado para ayudar a perder peso. Si bien saltarse comidas puede parecer una forma rápida y fácil de reducir calorías, en realidad puede hacer más daño que bien si no se hace correctamente.
La nutricionista Ashleigh Tosh advierte que no consumir suficientes alimentos durante el día puede provocar fatiga, letargo y problemas de salud a largo plazo.
Ashleigh dice: "Algunas personas piensan que saltarse comidas es una forma de perder peso, pero no se dan cuenta de que a menudo tiene el efecto contrario.
Tu cuerpo entrará en modo de inanición, lo que significa que cuando comes, es más probable que tu cuerpo almacene esas calorías como grasa y también es más probable que comas en exceso más tarde en el día cuando aumenta el hambre".
Según ella, a muchas personas les resulta difícil priorizar los horarios de las comidas debido a su ocupado estilo de vida y terminan saltándose el desayuno cuando tienen prisa por llegar al trabajo u olvidándose de almorzar debido a una larga reunión.
Sin embargo, alimentar el cuerpo con alimentos nutritivos es importante, "especialmente con un estilo de vida ocupado, ya que le ayuda a mantenerse con energía y productivo, lo que en última instancia conduce a un mayor éxito en su vida laboral".
Ashleigh Tosh describe siete razones por las que saltarse comidas puede ser perjudicial para la salud, entre ellas:
metabolismo lento
"Cuando pasas un largo periodo de tiempo sin comer, tu cuerpo entra en modo de inanición, lo que desencadena una respuesta natural para conservar energía ralentizando tu metabolismo.
Esto significa que cuando comes, es más probable que tu cuerpo almacene las calorías que consumes como grasa en lugar de quemarlas para su uso inmediato”, dice Ashleigh.
Nivel bajo de azúcar en sangre
Saltarse las comidas puede provocar que su nivel de azúcar en sangre baje. Esto puede provocar fatiga y mareos, dicen los expertos.
Además, cuando falta glucosa, el cerebro no funciona de manera eficiente, lo que genera problemas de concentración y una mayor tendencia a volverse irritable".
Mayor riesgo de comer en exceso
Saltarse comidas puede fácilmente hacer que uno se sienta mucho más hambriento después, advierte Ashleigh. Esto puede llevarnos a comer en exceso o a elegir alimentos poco saludables porque ansiamos alimentos con un alto contenido en carbohidratos y azúcar.
“Esto puede provocar aumento de peso y otros problemas de salud, como atracones”, afirma Ashleigh.
Deficiencia nutricional
"Saltarse las comidas significa que no le estás dando a tu cuerpo los nutrientes que necesita para prosperar", explica Ashleigh.
Los síntomas más comunes de deficiencia de nutrientes son pérdida severa de cabello, dolor de huesos, fatiga, ritmo cardíaco irregular y problemas en la boca. La desnutrición también puede provocar complicaciones de salud más graves, como la anemia por deficiencia de hierro.
Las hormonas del hambre están alteradas.
Si ignoras las señales naturales de hambre de tu cuerpo, puedes causar desequilibrios hormonales, reduciendo la producción de hormonas que suprimen el apetito.
“Esto hace que sea difícil saber cuándo estás lleno y puedes terminar comiendo en exceso”, dice Ashleigh.
Problemas digestivos
La experta advirtió que pasar demasiado tiempo entre comidas hará que el cuerpo libere una respuesta de estrés, lo que puede irritar el sistema digestivo y causar diarrea, dolor de estómago, náuseas y estreñimiento. “Esto se debe a una acumulación de ácido estomacal en el estómago, que ocurre cuando el estómago está vacío durante demasiado tiempo”, dice Ashleigh.
Problemas de salud mental
Además de la salud física, saltarse comidas constantemente también puede afectar gravemente a tu salud mental.
"Debido a que tu cuerpo comienza a producir más cortisol, también conocida como la hormona del estrés, tienes más probabilidades de experimentar ansiedad, cambios de humor y depresión", dice Ashleigh, y agrega: "También tienes un mayor riesgo de desarrollar un trastorno alimentario".
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