India comenzó a imponer un arancel de exportación del 20% a las cebollas a partir del 13 de septiembre de 2024, alegando la necesidad de garantizar el suministro interno. Además de imponer altos aranceles a las exportaciones de cebolla, India también ha implementado controles de exportación a través de impuestos, precios mínimos de exportación (MEP) e incluso ha impuesto una prohibición de exportación durante casi cinco meses, desde el 8 de diciembre de 2023 hasta el 3 de mayo de 2024.
El gobierno indio dijo que la eliminación del arancel de exportación del 20% es una demostración más del compromiso del gobierno de garantizar precios remunerativos para los agricultores y mantener los precios de la cebolla asequibles para los consumidores en este momento crítico.
A pesar de las restricciones a la exportación, se espera que India exporte alrededor de 1,71 millones de toneladas de cebollas en el año fiscal 2023-24; Mientras tanto, en el año fiscal 2024-2025 (al 18 de marzo), el país vendió alrededor de 1,16 millones de toneladas al mercado mundial. Según estimaciones del Ministerio de Agricultura de la India, la producción de cebolla de la cosecha rabi de este año se estima en 22,7 millones de toneladas, casi un 18% más que los 19,2 millones de toneladas del año pasado.
La cebolla Rabi, que representa entre el 70 y el 75% de la producción total de cebolla de la India, desempeña un papel clave debido a la amplia oferta y la estabilidad de precios hasta que comienza la cosecha de invierno, a partir de octubre y noviembre. La mayor cosecha estimada para este año hará bajar aún más los precios de la cebolla en los próximos meses, afirmó el regulador de la India.
India cosecha entre 28 y 30 millones de toneladas de cebollas al año y es uno de los mayores productores mundiales de este producto. Las cebollas indias suelen cultivarse tres veces al año.
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