La industria automovilística europea se enfrenta a una crisis sin precedentes debido al auge del mercado de vehículos eléctricos en los últimos años.
Stand del fabricante de automóviles chino Xpeng en el Salón Internacional del Automóvil de 2023 en Múnich, Alemania, septiembre de 2023. (Fuente: THX) |
Con la prohibición de venta de coches diésel y gasolina en la Unión Europea (UE) –que se prevé que entre en vigor en 2035 con el objetivo de reducir las emisiones contaminantes y contribuir a la consecución de los objetivos de crecimiento verde–, la industria automovilística europea ha sentido la necesidad de cambiar de rumbo iniciando la carrera hacia los vehículos eléctricos.
Sin embargo, el mercado de coches eléctricos, incluyendo tanto la producción como las exportaciones, está dominado por un pequeño número de grandes empresas, principalmente chinas. En 2023, estas empresas tenían casi el 20% de la cuota de mercado europea y solo Tesla podía competir en términos de ventas.
Las empresas automovilísticas europeas están especializadas en coches tradicionales y la transición completa a los vehículos eléctricos, aunque necesaria, las está poniendo en crisis. Los vehículos eléctricos requieren un suministro constante de materiales raros, como semiconductores y tierras raras, y requieren alta tecnología y grandes inversiones para su desarrollo.
Estos factores hacen que el precio de venta de los vehículos eléctricos sea mucho más alto que el de los vehículos tradicionales, lo que lleva a una disminución de la demanda general de vehículos eléctricos, especialmente debido a la sombría situación económica mundial. El exceso de oferta de tierras raras ha afectado a las empresas mineras y de procesamiento de todo el mundo.
Además, la fuerte dependencia de Europa de Pekín en materia de materias primas, sumada a sus deficiencias tecnológicas y de apoyo gubernamental en comparación con China, la colocan en desventaja en la carrera de los vehículos eléctricos.
En los últimos días, grandes fabricantes de automóviles europeos como la italiana Stellantis y la alemana Volkswagen han anunciado que quieren iniciar una campaña política para abordar esta cuestión y exigir las inversiones necesarias para la transición, dadas las tendencias del negocio en el periodo 2023-2024.
Los gobiernos europeos están explorando soluciones para apoyar a su industria automotriz durante estos tiempos extremadamente difíciles, como la posibilidad de importantes exenciones fiscales para los fabricantes. La UE también anunció en julio de 2024 un aumento de los aranceles a los coches eléctricos chinos, que se confirmará el próximo noviembre.
Sin embargo, el futuro de la industria automovilística europea, así como de otras industrias relacionadas, sigue siendo incierto por el momento.
Fuente: https://baoquocte.vn/xe-dien-trung-quoc-bung-no-nganh-o-to-chau-au-nhu-kien-bo-chao-nong-286278.html
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