El Ministerio de Comercio de China anunció el 4 de agosto que el país levantará los aranceles antidumping y antisubvenciones a la cebada importada de Australia. En consecuencia, la eliminación de aranceles entrará en vigor a partir del 5 de agosto, en medio de cambios en el mercado de la cebada en China, informó Reuters.
Tras el anuncio de China, la ministra de Asuntos Exteriores de Australia, Penny Wong, dijo que Canberra retiraría su caso ante la OMC contra Beijing por la política arancelaria.
"Acogemos con satisfacción este resultado. Esto allanará el camino para que nuestros exportadores de cebada vuelvan al mercado chino, beneficiando tanto a los productores australianos como a los consumidores chinos", declaró la Sra. Wong, según AFP, en un comunicado del 4 de agosto.
China ha impuesto aranceles a las importaciones de cebada procedentes de Australia durante los últimos tres años.
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Si bien se eliminarán los aranceles sobre la cebada australiana, otros productos australianos seguirán sujetos a restricciones chinas, incluido el vino, que también está sujeto a aranceles elevados. Las exportaciones de langosta y carne de algunos mataderos australianos a China también se han visto interrumpidas.
El resultado sobre la cebada demuestra la importancia del mecanismo de solución de diferencias de la OMC para proteger los intereses de los productores y agricultores australianos de clase mundial. Hemos dejado claro que esperamos que se siga un proceso similar para eliminar los aranceles sobre el vino australiano, declararon los tres ministros australianos en una declaración conjunta.
Las relaciones entre Australia y China se deterioraron en 2020 después de que Canberra pidiera una investigación sobre los orígenes de la pandemia de Covid-19, lo que llevó a Beijing a imponer aranceles a exportaciones australianas clave como la cebada, la carne de res y el vino ese mismo año. Australia respondió presentando un caso contra China ante la OMC, aunque el caso fue suspendido este año porque los ministros de comercio de ambos países siguieron adelante con las conversaciones.
Las tensiones entre Canberra y Pekín han disminuido desde que el Partido Laborista de centroizquierda llegó al poder en Australia el año pasado. En enero, China reanudó la compra de carbón australiano y, en mayo, Beijing también anunció que comenzaría nuevamente a importar madera australiana.
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