Los funcionarios deben respetar la integridad.

Người Lao ĐộngNgười Lao Động15/02/2025

(NLDO) - La Directiva Nº 42 del Politburó sobre el fortalecimiento de la educación en materia de ahorro, integridad, imparcialidad e imparcialidad ha planteado una cuestión central: la integridad de los cuadros.


El miembro permanente del Secretariado, Tran Cam Tu, acaba de firmar y emitir la Directiva No. 42 del Buró Político sobre el fortalecimiento del liderazgo del Partido en el trabajo de educación de diligencia, ahorro, integridad, imparcialidad e imparcialidad. En el cual, el Politburó exige a los cuadros y miembros del partido respetar la integridad, no ser corruptos ni derrochadores.

No es sólo una cuestión de ética personal, sino también un factor decisivo para la eficiencia del trabajo y la confianza de la gente en el aparato público.

Integridad: dos palabras simples pero que son una medida importante de la dignidad de un cuadro. Es la pureza moral, el respeto propio y el honor, la frontera entre el bien y el mal que cada cuadro y miembro del partido debe trazar por sí mismo.

En realidad, hemos sido testigos de muchos casos en que funcionarios se perdieron por falta de integridad. Un ejemplo típico es el incidente ocurrido en la industria médica. En el contexto de la pandemia de COVID-19, algunos funcionarios del sector salud han aprovechado la situación de emergencia para lucrar con la compra de insumos médicos, medicamentos, vacunas y equipos de prevención de epidemias. Estos funcionarios son responsables de proteger la salud de las personas, pero eligen el camino de la corrupción, afectando directamente el trabajo de prevención de epidemias, causando pérdidas de vidas y propiedades.

El caso más reciente fue el de Van Thinh Phat Group, donde varios funcionarios del banco ayudaron a la empresa a cometer fraude y apropiarse de los activos de las personas mediante la emisión de bonos.

Peor aún, muchos funcionarios, cuando se ven involucrados en violaciones, tratan de ocultar, culpar o evitar la responsabilidad. Como es habitual en el caso de Vietnam, muchos funcionarios borraron deliberadamente rastros, negaron su responsabilidad y trataron de culpar a sus subordinados. O como en el caso de la AIC, algunos funcionarios relacionados huyeron al extranjero, lo que demuestra la falta de responsabilidad e integridad de los funcionarios.

Los funcionarios desvergonzados son la causa fundamental de muchos males en el aparato público. Porque cuando ya no hay respeto propio ni honor, la gente fácilmente cambia su conciencia por beneficio personal. Las consecuencias de esto no son sólo pérdidas económicas sino también una grave pérdida de confianza pública. Cuando la gente ya no confía en el gobierno, por muy buena que sea una política, es difícil implementarla eficazmente.

Por lo tanto, construir un equipo de cuadros honestos y éticos no sólo es una necesidad urgente sino también una tarea vital del sistema.

Para construir y fortalecer la integridad entre los cuadros, es necesario implementar muchas soluciones sincrónicas. En primer lugar, es necesario fortalecer la educación ética revolucionaria, con especial atención a la educación sobre la integridad. Además, es necesario que exista un estricto mecanismo de control del poder, creando un ambiente de trabajo transparente para que los funcionarios "no puedan ser corruptos o negativos".

El lema “no quiero, no puedo, no me atrevo, no necesito” contra la corrupción y la negatividad debe aplicarse con firmeza y transparencia. En el cual, el "no querer" es una manifestación de integridad - cuando el funcionario se fija límites éticos.

Por supuesto, para lograr esto, además de la autoconciencia de cada individuo, también es necesario crear condiciones materiales apropiadas: "mejorar la vida de los cuadros, militantes del partido, funcionarios y empleados públicos".

También debe comprenderse plenamente la responsabilidad de dar ejemplo a los funcionarios y líderes clave. Cuando los líderes demuestran integridad en su trabajo y en su vida, no sólo crean confianza en sus subordinados sino que también contribuyen a construir una cultura de integridad en todo el sistema.

Por el contrario, si el líder carece de integridad, las consecuencias serán extremadamente graves.

Hablando francamente, la integridad es la "brújula moral" de un cuadro.

Esta no es sólo la petición del Partido sino también la demanda legítima del pueblo. Sólo cuando los cuadros valoren verdaderamente la integridad y la utilicen como principio rector de sus acciones, Vietnam podrá construir una administración limpia y eficaz que satisfaga las expectativas del pueblo y lleve al país a una nueva era.



Fuente: https://nld.com.vn/noi-thang-can-bo-phai-trong-liem-si-196250214202530484.htm

Kommentar (0)

No data
No data

Event Calendar

Mismo tema

Misma categoría

Mismo autor

No videos available