A medida que la aristocracia del viejo continente desarrolló un gusto por los viajes alrededor del siglo XVII, nació el concepto del gran tour, en el que las familias viajaban a través de Europa, con Italia como destino principal.
En aquella época, los inversores inteligentes aprovecharon la oportunidad para crear los hoteles más lujosos, aptos para reyes y reinas. Los hoteles de lujo cuentan con iluminación eléctrica y ascensores mecánicos: mejoras que rara vez se ven en residencias privadas. Muchos están adornados con una arquitectura e interiores intrincados que recuerdan a los grandes palacios de Europa.
Estos hoteles ofrecen el tipo de servicio de alta gama que normalmente se encuentra en prestigiosos clubes privados y la cocina que normalmente se encuentra en los mejores restaurantes de Europa. Los hoteles de lujo se han convertido en lugares para conocer gente con ideas afines, hacer conexiones sociales y de negocios y disfrutar de las mejores cosas de la vida.
Mientras la industria de servicios de lujo estaba en sus inicios, nació Kempinski. Desde 1897, el nombre Kempinski está asociado al lujo clásico europeo. Se sabe que mucho antes de que Kempinski entrara en el negocio hotelero, los restaurantes del grupo en Berlín ya eran muy famosos. Los berlineses adinerados hacen cola para disfrutar delicias locales e internacionales como langosta y caviar.
Hasta la fecha, este hotel cuenta con 76 instalaciones en 31 países de 4 continentes. Cada instalación tiene sus propias características y una larga historia. En Asia, la primera instalación estuvo en China, funcionó en 1992 y ya ha gestionado más de 30 hoteles, de los cuales los de Tailandia y Oriente Medio son destinos ideales para la realeza y los súper ricos.
En Estambul, el hotel está situado a orillas del Bósforo, combinando encanto y tradición, uniendo el antiguo palacio del sultán y un edificio moderno. Lo más destacado son las 11 suites del complejo palaciego, que ha albergado desde familias reales hasta representantes gubernamentales, íconos de la música, el cine, los deportes y el entretenimiento.
Tres hoteles en Dubai están conectados con los principales destinos de compras. Los huéspedes pueden disfrutar de sus compras en los lujosos centros comerciales Dubai Mall y Mall of the Emirates.
Tuberculosis (según Tien Phong)Fuente
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