Los acantilados de Smoking Hills en Canadá han estado humeando durante aproximadamente 7.000 a 10.000 años debido a reacciones químicas, lo que hace que el aire circundante sea tóxico.
Un barco se acerca a Smoking Hills en los Territorios del Noroeste de Canadá. Foto: Se Mo/Flickr
Puede parecer que las Colinas Humeantes se originaron a partir de una extraña actividad volcánica o geotérmica en las profundidades de la superficie de la Tierra, pero en realidad son el resultado de una reacción química que ha estado ocurriendo durante miles de años, informó IFL Science el 15 de mayo.
Smoking Hills se encuentra en la costa este de Cabo Bathurst, Territorios del Noroeste de Canadá, no lejos del Océano Ártico. El humo se produce por la combustión espontánea de la pizarra bituminosa en las capas del acantilado. Los minerales de azufre, como la pirita y el lignito, reaccionan con el aire a medida que los acantilados se erosionan, encendiéndose y creando un flujo constante de humo. Como resultado, el área circundante se llenó de dióxido de azufre, lo que hizo que el aire fuera tóxico y difícil de respirar.
Smoking Hills también tiene pozas dispersas de agua de color rojo rubí con alta acidez y contenido de azufre. Las altas concentraciones de azufre también significan que el lugar huele a huevos podridos.
"Es como el infierno en la Tierra. Todo es horrible. Hay que usar equipo de protección completo, si no, los ojos y la garganta se queman. Puede matarte instantáneamente si te acercas demasiado", dijo Steve Grasby, científico del Servicio Geológico de Canadá que estudia la geoquímica de las rocas sedimentarias.
Los expertos no están seguros de cuándo comenzaron a humear las Colinas Humeantes, pero Grasby dijo que la reacción puede haber comenzado hace unos 7.000 a 10.000 años, cuando los glaciares de la región se retiraron y dejaron expuesta la pared rocosa.
Los acantilados han aparecido en las culturas indígenas durante siglos, pero fueron registrados por primera vez por los europeos en 1826, durante el viaje del explorador británico John Franklin. En 1850, el explorador irlandés Robert McClure y su tripulación partieron del Ártico canadiense en busca de los marineros desaparecidos de la expedición Franklin. Cuando vieron humo proveniente de Smoking Hills, se decepcionaron, confundiéndolo con una señal de las personas desaparecidas.
El medio ambiente de Smoking Hills ha sido estudiado extensamente por muchos científicos. Creen que las características extrañas del sitio podrían ayudar a los humanos a aprender más sobre la capacidad de Marte para albergar vida.
Thu Thao (según IFL Science )
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