Argentina deportó a la esposa y a los hijos del líder de una banda ecuatoriana prófuga, Adolfo Macías, declarando que el país no es una "guarida del crimen".
La ministra de Seguridad argentina, Patricia Bullrich, dijo el 19 de enero que familiares de Adolfo Macías, apodado "Fito", fueron detenidos en una zona residencial de lujo de la provincia de Córdoba. El funcionario cordobés Juan Pablo Quinteros dijo que los permisos de residencia temporal de la familia habían sido revocados a través de una "resolución migratoria", lo que permite a las autoridades "detenerlos y expulsarlos del país".
Según Bullrich, la esposa de Fito, Inda Mariela Penarrieta, de 48 años, se mudó al barrio el 5 de enero, unos días antes de que su esposo escapara de la prisión en Guayaquil, Ecuador, con sus tres hijos, de entre 4 y 21 años, y otros pandilleros.
Tras ser detenidos fueron trasladados a un avión de la Fuerza Aérea Argentina. Horas después, el avión aterrizó en el aeropuerto de Guayaquil, Ecuador.
"Argentina nunca será una cueva del delito", declaró el ministro del Interior, Guillermo Francos, en una conferencia de prensa junto a Bullrich y Quinteros.
La familia del líder de la pandilla Fito abandona un avión de la fuerza aérea argentina en el aeropuerto de Guayaquil, Ecuador, el 19 de enero. Foto: AFP
Las autoridades ecuatorianas no han comentado el incidente ni han dicho si algún miembro de la familia de Fito está buscado.
El jefe de la policía de Guayaquil, Víctor Herrera, advirtió que las pandillas podrían tomar represalias después de que la familia Fito fuera deportada de Argentina. "La policía nacional está en alerta ante cualquier posible evolución negativa", afirmó.
El presidente ecuatoriano, Daniel Noboa, anunció el 8 de enero que movilizará al ejército para garantizar la seguridad en las cárceles y municipios de todo el país mientras se busca a Fito. El señor Noboa dijo el 19 de enero que la policía estaba buscando a Fito por todas partes.
También pidió a su homólogo colombiano, Gustavo Petro, "realizar una búsqueda vigorosa" en el país. El comandante militar colombiano Hélder Giraldo dijo el 12 de enero que el ejército está en alerta máxima.
"Debemos luchar y restaurar nuestro país devastado", declaró el presidente Noboa.
Huyen Le (Según AFP )
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