El centro de datos del gobierno de Senegal es un proyecto conjunto con China, con servidores proporcionados por Huawei Technologies.
CAPTURA DE PANTALLA DE NIKKEI ASIA
La Iniciativa del Cinturón y la Ruta de China está pasando de grandes proyectos de infraestructura a sectores con menor intensidad de capital, como la tecnología de la información y la biotecnología, según un reciente análisis de datos de inversión de Nikkei Asia .
El documento enumera las nuevas inversiones en el sector "greenfield" de China, según el monitor de inversión extranjera directa del Financial Times, fDi Markets.
Digital
Según las estadísticas, la inversión en tecnologías de la información, comunicaciones y componentes electrónicos ascenderá a 17.600 millones de dólares en 2022, seis veces más que en 2013, cuando se lanzó la Iniciativa del Cinturón y la Ruta.
Esto significa más proyectos, como el nuevo centro de datos del gobierno de Senegal. La instalación está bajo vigilancia militar y se encuentra a media hora en coche de la capital, Dakar. La instalación, finalizada en 2021, es un proyecto conjunto con China, con servidores proporcionados por Huawei Technologies.
Cheikh Bakhoum, director general de Senegal Numerique (la agencia estatal que administra la instalación), dijo que el centro había devuelto a Senegal datos que anteriormente habían estado almacenados en servidores extranjeros administrados por empresas occidentales. Esto reduce costos y recupera la soberanía digital.
Senegal también ha instalado un cable submarino y cámaras de vigilancia urbana con financiación de China. Los datos de las cámaras se analizan mediante un software especializado.
China comenzó a exportar infraestructura digital desarrollada localmente a fines de la década de 2000, según Dai Mochinaga, profesor asociado del Instituto de Tecnología Shibaura de Japón.
“Esta tendencia se aceleró alrededor de 2013, cuando Huawei expandió sus inversiones en el extranjero”, dijo.
Biotecnología
Además de lo digital, la biotecnología es otra gran área de crecimiento para la inversión china, que se multiplicó por 29 entre 2013 y 2022, alcanzando los 1.800 millones de dólares.
El desarrollo de una vacuna contra la Covid-19 es un claro ejemplo. China ha exportado alrededor de 2.000 millones de dosis de vacunas a todo el mundo hasta finales de 2022, llegando a los países emergentes.
Mientras tanto, los principales fabricantes de vacunas de Europa se centran en gran medida en satisfacer las necesidades locales.
La empresa china Abogen Biosciences ha licenciado su tecnología para desarrollar una vacuna de ARN mensajero a la startup indonesia Etana Biotechnologies, que el año pasado completó una planta de fabricación de vacunas, con el objetivo de producir 100 millones de dosis.
La concesión de licencias tecnológicas es una forma rápida de ponerse al día con el resto del mundo y China ha respondido rápidamente, afirmó Andreas Donny Prakasa, director de relaciones corporativas de Etana Biotechnologies.
Inversión menos costosa
El cambio de la inversión china hacia áreas como la tecnología de la información y la biotecnología ha estado acompañado de una disminución del gasto en grandes proyectos de infraestructura. Los expertos dicen que esto se debe en parte a que invertir en áreas "blandas" como la tecnología de la información será menos costoso. Se invierte un promedio de 760 millones de dólares por proyecto de combustibles fósiles y 160 millones de dólares en minería. Mientras tanto, la biotecnología sólo necesita 60 millones de dólares por proyecto y los servicios de tecnología de la información 20 millones de dólares.
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