Si vas en tren a mi ciudad natal, oirás el grito del vendedor ambulante: "Cốốm, diez mil por kilo, cốm grasiento y dorado". Recuerda comprar alguno e invitar a tus amigos a disfrutarlo juntos, de lo contrario te habrás perdido un plato interesante.
Cuando éramos niños, mis hermanas y yo solíamos esperar a que nuestra madre volviera del mercado para pedirle regalos; cada estación tenía regalos diferentes. Cada año a finales de febrero ya hay frutos de palma. Las hermanas comparten la bolsa de frutos de palma que compró su madre, comiéndolos ruidosamente, con sus rostros aún manchados por el color de los frutos de palma. Hubo momentos en que mi madre traía palmeras frescas a casa para recogerlas ella misma. Como solíamos bromear los jóvenes, elegir palmeras era “un arte”. Un buen fruto de palma es el que proviene de una palmera a la que nunca se le han cortado las hojas, porque la gente suele cultivar palmeras para obtener hojas para techar las casas y hacer escobas. Si se corta la palmera una vez, el fruto de la palma se atrofiará, las semillas serán grandes y muy astringentes, perdiendo todo su sabor característico. Elija frutos de palma largos, semillas pequeñas, núcleo grueso, presione con el dedo para ver el color amarillo intenso como la grasa de pollo. Cuanto más vieja es la palma, más sabrosa y grasosa es.
Antes de remojar, lave bien el cepillo y sacúdalo con objetos afilados como bambú o vidrio roto para quitar la capa exterior del cepillo y reducir la astringencia. Debes conocer la técnica para hacer la olla, tomar agua de pozo y calentarla a la temperatura adecuada. Remoje el cepillo durante 15 a 20 minutos, al apretarlo el cepillo quedará suave y la espuma flotará y brillará como la grasa de pollo. El fruto de la palma tiene una cáscara fina de color marrón oscuro y un núcleo amarillo. Cuanto más grueso, mejor. Si lo hierves a fuego lento en agua hirviendo el tiempo será más rápido. Recuerde tapar bien la olla mientras cocina a fuego lento. Preste atención al momento de cocinar el agua, de lo contrario el cepillo se endurecerá y no será comestible.
La palma estofada se puede comer sola para disfrutar de su sabor rico y grasoso, o sumergida en salsa de pescado, chile o sal. También se puede comer con arroz...
Además del fruto de la palma, en mi ciudad natal la gente también elige la fruta con pulpa gruesa y grasosa y luego raspan la piel para hacer encurtidos. El melón de palma tiene el sabor salado de la sal, el sabor graso de la palma, se puede comer con arroz o como refrigerio, ambos son muy deliciosos.
Si visitas alguna familia en mi pueblo, cuando veas palma encurtida en la bandeja de la cena, abre tu corazón para disfrutarla y aceptarla. Seguramente nunca olvidarás su sabor aunque luego comas todo tipo de delicias.
Fuente: https://baodaklak.vn/du-lich/202503/thom-bui-co-om-que-toi-7c7007a/
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