Sin embargo, a pesar de tener la ventaja de jugar en casa en el partido de vuelta a las 2:00 a. m. (18 de mayo), eso no significa que el Manchester City tenga derecho a pensar en Estambul, donde se disputará la final el 10 de junio.
Por supuesto, el Manchester City tiene derecho a considerar positivo un empate en Madrid, pero el equipo de Guardiola también sabe por amarga experiencia que el Real suele jugar mejor en el partido de vuelta a estas alturas del torneo.
Parece haber algo inherente al Manchester City que lo convierte en su peor enemigo en la competición europea. El fracaso de los Citizens a la hora de controlar el juego en el partido de ida alimentó aún más la creencia de que podían perder la calma en las fases decisivas del partido de vuelta. Mientras tanto, los blancos son muy valorados por su compostura. Eso significa que el Real tiene la experiencia para evitar un colapso en este partido a menos que el Manchester City marque más goles al principio.
Aunque Militao volverá de su sanción y Mendy se ha recuperado de su lesión, son muy buenas opciones para el técnico Ancelotti tanto a nivel personal como táctico, pero la defensa todavía se considera el punto débil del Real. Si bien el Real no tuvo problemas para crear oportunidades contra el Manchester City, se vio abrumado por el poder de ataque de sus oponentes desde el comienzo del partido de ida. Si esto continúa sucediendo mañana por la mañana en el Etihad Stadium, "Los Blancos" podrían verse en una situación extremadamente difícil. Por eso también es tan importante la salud de Camavinga porque la defensa del equipo jugará mejor con él en la plantilla.
Por el contrario, la defensa del Manchester City ha sido muy bien valorada en la Liga de Campeones esta temporada, con solo 5 goles concedidos en 11 partidos hasta ahora. Sin embargo, según el técnico Guardiola, en comparación con la ida, "tenemos que defender mejor en algunas zonas y quizá tenemos que atacar un poco diferente".
En definitiva, la final de la Champions League está muy cerca de la mira del Man. City, pero ya ha pasado el tiempo de los discursos, ahora hay que demostrarlo sobre el terreno de juego. Mientras tanto, aunque la misión del Real es sencilla -ganar por todos los medios, en la prórroga o en los penaltis-, conseguirlo es muy complicado.
Enlace de origen
Kommentar (0)