(NLDO) - Los datos de tres estudios espaciales a gran escala confirman que el monstruo de la Vía Láctea al que pertenece la Tierra es muy diferente de sus pares.
La Vía Láctea, el mundo al que pertenece la Tierra y todo lo demás en el sistema solar, a menudo es vista como un monstruo en el mundo galáctico.
Es una de las pocas galaxias más masivas en la actualidad y ha absorbido al menos 20 galaxias más pequeñas para alcanzar su tamaño y masa actuales.
Los científicos han recorrido recientemente el universo para encontrar 101 galaxias con masas similares a la Vía Láctea, que inicialmente se había previsto que tuvieran propiedades similares.
Pero los resultados de la investigación han demostrado lo contrario.
La Vía Láctea vista desde Chile es en realidad una galaxia espiral. Nuestra Tierra se encuentra en el borde de su brillante disco estelar - Foto: ESO
Según Universe Today, tres estudios cósmicos a gran escala, SAGA III, SAGA IV y SAGA V, han registrado respectivamente los sistemas de satélites alrededor de las 101 galaxias mencionadas anteriormente, las características de formación estelar de esos 101 sistemas de satélites y, finalmente, han modelado estos sistemas de satélites.
Las comparaciones entre la Vía Láctea y 101 galaxias aparentemente similares han mostrado varias diferencias significativas.
Se analizaron específicamente 378 galaxias satélite de la Vía Láctea y 101 galaxias de masa similar. De éstas, cuatro pertenecen a la Vía Láctea, entre ellas la famosa Gran Nube de Magallanes (LMC) y la Pequeña Nube de Magallanes (SMC).
Hay galaxias con menos satélites o sin ellos, pero aquellas con satélites grandes como la LMC a menudo tienen muchos satélites, hasta 13. Porque la masa del satélite más grande siempre es proporcional al número de satélites de esa galaxia.
Sólo la Vía Láctea posee un espacio circundante desierto con sólo 4 satélites. Ésta es la primera rareza.
Un segundo estudio basado en este conjunto de datos muestra que cuanto más cerca están los satélites de su galaxia madre, más lento es el ritmo de formación de estrellas en su interior, probablemente debido al gran tirón del halo de materia oscura de la galaxia madre.
La segunda anomalía apareció: los dos satélites de la Vía Láctea, la LMC y la SMC, están formando estrellas vigorosamente a pesar de estar muy cerca de la "madre", mientras que los más distantes han dejado de formar estrellas.
Los científicos creen que esta rareza puede deberse a que LMC y SMC cayeron recientemente en el halo de materia oscura de la Vía Láctea, pero aún no se explica por qué los otros pequeños satélites dejaron de formar estrellas.
La profesora Risa Wechsler, del Laboratorio Nacional de Aceleradores SLAC (EE.UU.), cofundadora del proyecto SAGA, explicó que los resultados muestran que la Vía Láctea es un tipo de galaxia atípica en el universo.
Para entender más sobre esta anomalía que habita la Tierra, sólo nos queda seguir buscando en el universo mundos que sean similares en masa a ella y -con suerte- igual de extraños.
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Fuente: https://nld.com.vn/trai-dat-cu-ngu-o-mot-trong-nhung-noi-di-thuong-nhat-vu-tru-196241129093248737.htm
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