El CFE se firmó un año después de la caída del Muro de Berlín, estableciendo límites verificables a los tipos de equipo militar convencional que la OTAN y el entonces Pacto de Varsovia podían desplegar.
El tratado fue diseñado para evitar que cualquiera de los bandos de la Guerra Fría acumulara fuerzas para un ataque rápido contra el otro en Europa.
El vicepresidente del Consejo de Seguridad de Rusia, Dmitri Medvedev, visita la Oficina Estatal de Construcción de Maquinaria de Raduga en Dubna (Rusia), en febrero de 2023. Foto: Sputnik
Rusia suspendió su participación en el tratado en 2007 y dejó de participar activamente en 2015. Más de un año después de su invasión a gran escala de Ucrania, el presidente Vladimir Putin firmó un decreto en mayo rechazando el tratado.
El Ministerio de Asuntos Exteriores de Rusia dijo que Rusia se había retirado oficialmente del tratado y que éste ahora era "historia". “El Tratado FACE se concluyó al final de la Guerra Fría, cuando parecía posible la formación de una nueva estructura de seguridad global y europea basada en la cooperación y se estaban haciendo los esfuerzos adecuados”, señala el comunicado.
Rusia dijo que el impulso de Estados Unidos a la expansión de la OTAN había llevado a los países de la alianza a "romper abiertamente" las restricciones del tratado del grupo, y agregó que la adhesión de Finlandia a la OTAN y el ingreso de Suecia significaban que el tratado estaba muerto.
La guerra en Ucrania ha provocado la peor crisis en las relaciones de Moscú con Occidente desde la Guerra Fría. El portavoz del Kremlin, Dmitry Peskov, dijo el fin de semana que las relaciones con Estados Unidos estaban en un nivel por debajo de cero.
Después de que Rusia anunció su intención de retirarse del tratado este año, la OTAN condenó la decisión, diciendo que socavaba la seguridad euroatlántica.
Mai Anh (según Reuters)
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