Se espera que Wall Street continúe estableciendo nuevos récords en la última semana de negociación del año, ya que las ganancias recientes han sido muy fuertes.
El S&P 500 ha subido más de un 4% sólo en diciembre y un 24% este año. El índice se encuentra ahora a poco menos del 1% de su máximo histórico y va camino de su octava ganancia semanal consecutiva. El DJIA también alcanzó un nuevo pico el 13 de diciembre, después de que la Reserva Federal de Estados Unidos (Fed) decidiera no aumentar las tasas de interés.
Los acontecimientos históricos sugieren que este impulso ascendente puede continuar en el corto plazo. Wall Street suele subir hacia finales de año. Este fenómeno se llama "Rally de Papá Noel".
Según datos del Stock Trader's Almanac desde 1969, en las últimas cinco sesiones de negociación de diciembre y las dos primeras de enero, el índice S&P 500 subió una media de 1,3%. Hay muchas razones para este aumento, desde la necesidad de comprar más antes del nuevo año hasta la anticipación general de la temporada navideña.
Este año, el optimismo del mercado es alto. La Reserva Federal de Estados Unidos sorprendió a muchos a principios de este mes al señalar que su proceso de ajuste de política monetaria podría haber terminado, al tiempo que pronosticó al menos tres recortes de tasas de interés el próximo año.
La inflación estadounidense también se está desacelerando. Los datos publicados a fines de la semana pasada mostraron que en noviembre, el índice de precios del gasto personal (PCE), la medida de inflación preferida por la Fed, cayó por primera vez desde mediados de 2020.
"La gran noticia en este momento es que la Reserva Federal está a punto de cambiar su política. Eso ha apoyado al mercado y ha mejorado la confianza de los inversores. Eso no va a cambiar en la última semana del año", dijo Angelo Kourkafas, estratega de inversiones de Edward Jones.
Los datos del Bank of America muestran que los inversores están entusiasmados por comprar acciones. Los clientes del banco compraron un total neto de 6.400 millones de dólares en acciones que cotizan en Estados Unidos la semana pasada, la mayor cantidad desde octubre de 2022.
La demanda de los inversores minoristas también ha aumentado considerablemente en las últimas 4-6 semanas, informó Vanda Research la semana pasada. "Tras aplicar una política de tipos de interés elevados en los últimos meses, el cambio de postura de la Reserva Federal y la posibilidad de un aterrizaje suave de la economía estadounidense han llevado a los individuos a invertir su dinero en activos de riesgo como las acciones. Creemos que esta tendencia continuará durante el nuevo año", señala el informe.
Otra razón, según Kevin Mahn, director de inversiones de Hennion & Walsh Asset Management, es el miedo a perderse algo (FOMO). Por lo tanto, los inversores con mucho efectivo podrían encontrar oportunidades en el mercado esta semana.
"El mercado parece estar sobreexigido, pero creo que los índices aún pueden subir, debido al miedo a perderse algo", concluyó.
Ha Thu (según Reuters)
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