Ahora, en el último anuncio de Canon, la compañía dice que no sólo comenzará a enviar dichos dispositivos este año, sino que también espera dominar la tecnología de nanoimpresión de 2 nm con el tiempo.
La máquina de fabricación de chips de 5 nm de Canon es 10 veces más barata que la de ASML
Con la fotolitografía clásica, los contornos de un microchip se dibujan sobre un sustrato de silicio proyectando una imagen a través de una fotomáscara y luego grabando las partes del cristal no protegidas por la fotorresistencia. La tecnología de Canon implica la nanoimpresión de la forma de un microchip sobre silicio. Permitirá un ahorro de costes de hasta 10 veces y una reducción del 90% en los costes energéticos en comparación con las técnicas clásicas de fotolitografía, que hoy en día se utilizan principalmente en la producción de chips de memoria NAND 3D.
Según representantes de la empresa japonesa, la tecnología está lista para la producción en masa y las entregas de dispositivos especiales a los clientes comenzarán este año. Sin embargo, la tecnología de Canon no reemplazará a la litografía ultravioleta extrema (EUV) a escala industrial, sino que es una solución más económica y complementaria.
El problema es que cuando el mercado de equipos de fotolitografía está experimentando un retraso en las entregas de más de un año, la disposición de Canon de entregar máquinas de producción de chips de 5 nm este año atraerá la atención de los clientes. Una limitación que comparte Canon con respecto a su sistema es la tasa de error bastante alta, y según los expertos, esta tasa no debe superar el 10% para ser considerada comercialmente atractiva.
Además, Canon también apuesta por la tecnología de impresión con nanochip de 2 nm. Para ello, la compañía tendrá que contar con algunos equipos adicionales, aunque los ajustes no son significativos.
La pregunta es: ¿los clientes de China podrán comprar este tipo de equipos a Canon? Las cosas no son tan simples. Por un lado, Canon no utiliza componentes ni tecnología fabricados en Estados Unidos, por lo que el gobierno estadounidense no puede imponer restricciones a la exportación a la empresa japonesa. Por otra parte, las restricciones a las exportaciones de Japón a China son significativamente más amplias que las de Estados Unidos. Como resultado, el acceso a las nano impresoras de Canon para las empresas chinas es incierto.
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