La señora Marlene Engelhorn (Foto: CBS News).
Una mujer austriaca perteneciente a una familia de negocios europea acepta parte de su herencia y deja que 50 desconocidos decidan qué hará con más de 27 millones de dólares. Así lucha contra la desigualdad de la riqueza.
Marlene Engelhorn, de 31 años, cree que el gobierno austriaco debería gravar la riqueza y la herencia para reducir la brecha entre ricos y pobres. Ella también actúa por su cuenta.
Engelhorn envió invitaciones a 10.000 personas seleccionadas al azar en Austria, pidiéndoles que completaran una encuesta. De los que completaron el cuestionario, seleccionó a 50 personas de diferentes orígenes que, en su opinión, representaban al pueblo austríaco.
Actuarán como consejo asesor para aconsejarla sobre cómo gastar su herencia de 27 millones de dólares.
Engelhorn dijo que su riqueza se acumuló incluso antes de que ella naciera.
Según BBC News, Engelhorn heredó millones de dólares de su abuela, fallecida en 2022. Son descendientes de Friedrich Engelhorn, fundador de BASF, una empresa farmacéutica alemana.
No está claro cuánto heredó Engelhorn, que vive en Austria, de su abuela, cuyo patrimonio, según Forbes, ronda los 4.200 millones de dólares. Ella anunció antes de que su abuela falleciera que donaría alrededor del 90% de su herencia.
Engelhorn cree que muchos herederos prácticamente no comparten ninguna riqueza con la sociedad y se benefician de privilegios fiscales.
Ella cree que la pobreza está aumentando en Austria. Según EUROSTAT, la tasa de pobreza en Austria se sitúa en el 14,8%.
En lugar de simplemente donar el dinero que heredó, quería que otros la ayudaran a gastarlo.
El consejo de 50 personas se reunirá durante seis fines de semana de marzo a junio para discutir cómo se puede utilizar la riqueza de Engelhorn para generar cambios. Ella pagará sus gastos de viaje y alojamiento durante la reunión.
Según el sitio web Guter Rat, el 1% más rico de la población de Austria posee el 50% del patrimonio neto del país. La mayoría de ellos heredaron dinero de sus familias.
Austria no aplica impuestos sobre el patrimonio ni sobre las sucesiones, mientras que más de dos tercios de los austriacos apoyan el impuesto sobre el patrimonio.
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