En el ranking mundial, la selección vietnamita ocupa el puesto 95, mientras que la de Hong Kong (China) ocupa el 147. Jugar en casa y tener una clasificación más alta es una ventaja que ayuda a la selección vietnamita a aspirar a la victoria. Aunque la naturaleza de este partido es sólo un amistoso internacional, el equipo vietnamita está decidido a ganar para crear impulso y confianza en el partido de debut del nuevo entrenador Philippe Troussier.