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La temperatura media global aumentó más de 2 grados centígrados respecto a los niveles preindustriales por primera vez. Estos son los datos publicados por el Servicio de Cambio Climático Copernicus (C3S) de la Unión Europea el 21 de noviembre.
En consecuencia, la temperatura media global del 17 de noviembre fue 2,07 grados centígrados más alta que el promedio del período 1850-1900, y también es el mayor aumento jamás registrado. El pasado mes de septiembre, C3S predijo que 2023 casi con certeza superaría el récord del año más cálido registrado, 2016, con temperaturas que podrían no tener precedentes en la historia y probablemente las más cálidas en más de 100.000 años. Sólo en octubre del año pasado las temperaturas fueron 1,7 grados centígrados más altas que el promedio del mes preindustrial.
Ese mismo día, el Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente (PNUMA) publicó su informe anual sobre la brecha de emisiones, en el que advierte que el planeta va camino de calentarse rápidamente de 2,50 °C a 2,90 °C entre ahora y 2100. Si se depende únicamente de las políticas y los esfuerzos actuales para reducir las emisiones, la Tierra se calentará hasta 30 °C , superando con creces los límites clave establecidos por el Acuerdo de París de 2015 sobre el cambio climático. Las últimas cifras están convirtiendo la cuestión de abordar las emisiones de metano en un nuevo tema candente en la 28ª Conferencia de las Partes en la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático (COP28).
Como está previsto, la COP28 se celebrará del 30 de noviembre al 12 de diciembre en Dubái, Emiratos Árabes Unidos (EAU). Los debates sobre el clima a menudo giran en torno a la reducción del CO2, el gas de efecto invernadero más peligroso. Sin embargo, el metano (CH4), otro gas que tiene el potencial de calentar la Tierra y es considerado el asesino oculto después del CO2, se está convirtiendo en un nuevo punto candente en las discusiones de la COP28. A nivel nacional y regional, en 2021, la Unión Europea y Estados Unidos lanzaron el Compromiso Global del Metano, cuyo objetivo es reducir las emisiones globales de metano en un 30% para 2030, en comparación con los niveles de 2020.
Tanto Estados Unidos como China han anunciado que incluirán el metano en sus planes de acción climática. Mientras tanto, las principales corporaciones de petróleo y gas también propusieron la Iniciativa Climática del Petróleo y el Gas para lograr emisiones netas cero de las actividades de exploración y producción para 2030.
El metano es abundante en la naturaleza y es el componente principal del gas natural. Es el segundo mayor contribuyente al cambio climático, contribuyendo aproximadamente con el 16% al calentamiento global. El metano permanece en la atmósfera sólo unos 10 años, pero su efecto de calentamiento es mucho más fuerte que el del CO2. En concreto, en 100 años, el impacto del metano en el calentamiento global será 28 veces mayor que el del CO2. Si se calcula a lo largo de 20 años, la diferencia es 80 veces.
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