En los últimos años, Alemania se ha enfrentado a más vientos contrarios en el lado de la oferta. Foto ilustrativa. (Fuente: Euractiv) |
La caída de Alemania al quinto lugar se debe a su dependencia de la energía rusa para impulsar la producción, según la investigación del CEBR.
“Alemania se ha enfrentado a crecientes dificultades en el lado de la oferta en los últimos años, en particular debido al aumento de los precios mundiales de la energía en 2022. La dependencia de Alemania de los suministros energéticos rusos ha exacerbado este problema”, escribió el CEBR.
El impacto de un shock en los precios de la energía ha contribuido a impulsar la inflación en la mayor economía de la Unión Europea (UE), señala el informe. Se espera que los precios aumenten un 6,3% en 2023, frente al aumento del 8,7% registrado en 2022, pero aún por encima de los promedios recientes.
La alta inflación ha contribuido a debilitar el poder adquisitivo y a limitar el consumo, lo que ha afectado significativamente a los servicios orientados al consumidor. Se prevé que el producto interior bruto (PIB) de Alemania se reduzca un 0,4 % en 2023, el crecimiento más bajo del país desde 2009, según el informe.
Además, el PIB mundial se duplicará con creces hasta alcanzar los 219 billones de dólares en 2038, debido a “la continua expansión de economías anteriormente subdesarrolladas a medida que alcanzan y superan a los países ricos”, dijo el CEBR.
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