Años de experiencia
Según el canal DW (Alemania), algunos de los métodos potencialmente más óptimos para lidiar con las altas temperaturas ya existen en Oriente Medio. La profesora Sylvia Bergh, de la Universidad Erasmo de Róterdam (Países Bajos), señaló que la gente de Oriente Medio está acostumbrada a las altas temperaturas, por lo que suele vivir en casas más frescas.
Las tradiciones centenarias de Oriente Medio, adaptadas para hacer frente a la escasez de agua y a las altas temperaturas, proporcionan una valiosa reserva de alimentos, dijo Bergh. Mencionó algunas adaptaciones en Oriente Medio, como las torres “captadoras de viento” que dirigen el aire fresco a los espacios habitables, utilizando pantallas en lugar de paredes... Otro ejemplo son los paneles tallados de estilo Mashrabiya, de madera o piedra, con motivos islámicos. Se colocan frente a grandes ventanales, bloqueando y difundiendo la luz solar, permitiendo que el aire fresco entre al espacio habitable y creando privacidad.
Además, algunos nuevos proyectos de construcción en Oriente Medio se inspiran en la arquitectura tradicional para maximizar la sombra pasiva y la circulación del aire en condiciones desérticas cálidas, secas y ventosas. Un ejemplo es el proyecto Masdar City en Abu Dhabi (Emiratos Árabes Unidos) con calles cortas (menos de 70 m) y estrechas bloqueadas por edificios, lo que provoca que la temperatura en la calle sea baja, a veces solo 20 grados centígrados, mientras que a pocos metros, la temperatura del desierto de arena puede alcanzar los 35 grados centígrados.
El periodista Kholoud al-Amiry en Bagdad (Irak) compartió que cuando el termómetro muestra señales de subir a 50 grados centígrados, la gente local generalmente tiene tiempo libre y se les pide que permanezcan en sus casas. Dijo que la gente obtiene información a través de la televisión o la red social Facebook. También se aconseja colocar recipientes con agua debajo de los árboles para los pájaros y otros animales durante el clima cálido. Kholoud al-Amiry dijo que las autoridades locales también advierten a los residentes sobre las condiciones de hacinamiento en los hospitales durante las olas de calor o las tormentas de arena.
Sin embargo, existen grandes diferencias en cómo los países de Oriente Medio se adaptan a las altas temperaturas. El aire acondicionado es un ejemplo de cómo los países ricos como los del Golfo protegen a las poblaciones vulnerables del calor. En países económicamente más modestos, a la población local puede resultarle difícil permitirse el aire acondicionado, por lo que esta no es una solución popular.
El Oriente Medio también corre riesgo por las temperaturas extremas.
En mayo, un estudio publicado en la revista científica Nature Sustainability describió el impacto de las temperaturas extremas en el mundo en los próximos 50 años si la temperatura global aumenta en 1,5 grados centígrados. Las temperaturas extremas se registran cuando la temperatura media anual ronda los 29 grados centígrados. Según el estudio, en 2050, la mayoría de la gente en Oriente Medio se enfrentará a temperaturas extremas.
Otro estudio publicado en la revista médica The Lancet en abril se centró en el número de muertes relacionadas con el calor en Oriente Medio y el norte de África si la Tierra continúa calentándose. El estudio predice que las muertes relacionadas con el calor en las dos regiones aumentarán de un promedio de 2 por cada 100.000 personas por año hoy a 123 por cada 100.000 personas en las últimas dos décadas del siglo.
El estudio publicado en The Lancet también destacó que los factores demográficos y el creciente movimiento de personas hacia las ciudades de Medio Oriente afectarán el modo en que las temperaturas extremas afectan a las poblaciones locales. Se estima que para 2050, casi el 70% de la población vivirá en grandes ciudades y, para 2100, en Oriente Medio habrá más ancianos que jóvenes.
“La edad avanzada y la alta densidad poblacional son factores de riesgo clave para la morbilidad y mortalidad relacionadas con el calor”, dijeron los autores del estudio de la Escuela de Higiene y Medicina Tropical de Londres y el Instituto de Chipre. Las personas mayores corren riesgo físico mientras que las ciudades suelen registrar temperaturas más altas debido al fenómeno de la “isla de calor urbana”. Según DW, las ciudades pueden tener temperaturas entre 2 y 9 grados centígrados más altas que las zonas rurales circundantes.
Eleni Myrivili, de ONU Hábitat, el programa de asentamientos humanos de las Naciones Unidas, dijo a DW que, para responder eficazmente a la amenaza de las temperaturas extremas, los gobiernos necesitan un curso de acción claro para aumentar la conciencia, la preparación y la resiliencia.
Los planes de acción ayudan a la gente común a hacer frente a las altas temperaturas. Estas podrían incluir “centros de enfriamiento” administrados por el gobierno donde las personas pueden acudir para escapar del calor y beber agua, o medidas de preparación como campañas educativas sobre cómo mantenerse fresco cuando las temperaturas aumentan o plantar más árboles en las ciudades.
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