
Según un reportero de VNA en Tokio, la temporada de los cerezos en flor termina en destinos turísticos famosos de Japón como Tokio, Osaka o Kioto, cuando los cerezos Shomei Yoshino alrededor del monte Fuji comienzan a florecer.
Los lugares alrededor del Monte Fuji en la Prefectura de Yamanashi incluyen el Lago Kawaguchi, uno de los Cinco Lagos del Fuji, el Parque Arakurayama Sengen con la Pagoda Chureito, o el Lago de los Cisnes Yamanaka, el lago más grande de los Cinco Lagos del Fuji, que son atracciones turísticas populares.
Son lugares donde los visitantes pueden admirar dos símbolos de Japón al mismo tiempo, viendo la majestuosidad del Monte Fuji y disfrutando del encanto de los cerezos en flor.

Bajo el cálido sol primaveral, los visitantes pueden pasear bajo las hileras de cerezos Shomei Yoshio de color blanco rosado junto al lago Kawaguchi, subir las escaleras de piedra de casi 1 km de largo para admirar la majestuosa vista del Monte Fuji con la antigua Pagoda Chureito entre cientos de cerezos en flor o jugar con cisnes blancos en el lago Yamanaka.
Todos ellos aportan emociones especiales, imbuidas de características japonesas.
El contraste entre la suavidad y fragilidad de los cerezos en flor y la majestuosidad y el silencio del monte Fuji crean un equilibrio perfecto, como una sinfonía de la naturaleza japonesa.

Las flores de cerezo florecen sólo por un corto tiempo, simbolizando la fragilidad y la impermanencia de la vida, mientras que el Monte Fuji, con su forma perfectamente simétrica, representa la longevidad y la eternidad.
Es la armonía entre estas dos imágenes lo que hace que los visitantes no sólo admiren sino también sientan la profundidad espiritual y la filosofía de vida del pueblo japonés.
Según Pham Tuan-Xuan Giao (Agencia de Noticias de Vietnam/Vietnam+)
Fuente: https://baogialai.com.vn/khung-canh-tuyet-dep-cua-nui-phu-si-trong-mua-hoa-anh-dao-no-ro-post319244.html
Kommentar (0)