El 19 de octubre, la policía de la prefectura de Akita dijo que los osos atacaron a seis personas, incluidos varios estudiantes, en la ciudad de Kita-Akita en la prefectura.
Los ataques comenzaron alrededor de las 6:40 a.m. del 19 de octubre, cuando cuatro víctimas femeninas fueron atacadas por osos durante un período de 40 minutos, causándoles heridas en la cabeza y la cara y requiriendo hospitalización, según el periódico Asahi Shimbun del 20 de octubre.
Una de las víctimas, una mujer de 83 años, tuvo que ser trasladada en helicóptero al hospital debido a graves heridas que le provocaron una pérdida excesiva de sangre.
Aproximadamente 20 minutos después del ataque, un oso apareció en una parada de autobús y mordió la mano de una estudiante que esperaba el autobús a la escuela.
Los tres ataques ocurrieron en un distrito comercial cerca de la estación JR Takanosu, que está repleto de tiendas, casas y un hospital.
Más tarde ese día, una niña de 14 años fue atacada mientras caminaba a casa desde la escuela. La niña sufrió lesiones en la cabeza, el cuello y la rodilla.
En la prefectura de Iwate, cerca de la prefectura de Akita, un hombre y una mujer fueron atacados por un oso mientras recogían setas, y la mujer murió.
Según las estadísticas de NHK, desde abril, al menos 152 personas resultaron heridas, incluidas algunas muertas, por ataques de osos. Se han reportado incidentes en 17 de las 47 prefecturas de Japón, y el número de ataques está aumentando más rápido que nunca.
Un miembro del grupo de trabajo de respuesta a ataques de osos en la prefectura de Toyama dijo que el número de osos que abandonan las montañas hacia zonas más bajas está aumentando debido a la escasez de alimentos.
Mientras tanto, para la región de Hokkaido, Kevin Short, naturalista y profesor de humanidades en la Universidad de Ciencias de la Información de Tokio, dijo que la principal razón para el aumento de los enfrentamientos entre humanos y osos podría ser que la población de osos en Hokkaido se ha recuperado después de años de caza excesiva, y también hay menos cazadores de osos. Según Short, la disminución de la caza ha provocado un aumento del número de osos, lo que demuestra también que ya no tienen miedo a los humanos y se acercan a zonas pobladas.
Ante esta situación, el Ministerio de Medio Ambiente japonés ha puesto en marcha un programa piloto a partir de enero de 2023, promoviendo conexiones entre gobiernos locales, fuerzas policiales y organizaciones de caza para crear la capacidad de responder rápidamente y tomar medidas capturando o destruyendo a los osos cuando sean detectados.
Minh Hoa (reportado por Thanh Nien y Tuoi Tre)
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