El cáncer es una enfermedad peligrosa que puede afectar cualquier parte del cuerpo, incluidas las piernas. Reconocer signos tempranos de anomalías en las piernas puede ayudar a detectar el cáncer en sus primeras etapas, aumentando las posibilidades de un tratamiento exitoso.
Aparecen lunares inusuales
Los lunares son pequeñas manchas en la piel, formadas por la concentración de células pigmentarias. La mayoría de los lunares son benignos, sin embargo, algunos pueden convertirse en cáncer de piel, especialmente melanoma. Tenga en cuenta en particular los siguientes cambios:
- Los lunares tienen una forma asimétrica, bordes desiguales, límites poco claros y no tienen una forma definida.
- Lunares mayores de 6mm (tamaño de una goma de lápiz) o que cambian de tamaño repentinamente.
- Los lunares vienen en muchos colores diferentes (negro, marrón, rojo, blanco, azul), color desigual o cambian de color con el tiempo.
- Lunares que pican, sangran, forman costras, se ulceran, se hinchan, están rojos, duelen o resultan incómodos. Si nota alguno de los cambios mencionados anteriormente en un lunar, consulte a un dermatólogo de inmediato para que lo examine y le haga un diagnóstico.
Úlcera de curación lenta
Las úlceras son lesiones en la piel, generalmente causadas por traumatismos, infecciones u otras afecciones médicas. La mayoría de las úlceras se curan después de un período de tratamiento. Sin embargo, si la llaga no se cura después de algunas semanas, tiende a extenderse, supura líquido, sangra o es dolorosa, debe estar alerta a la posibilidad de cáncer de piel.
El carcinoma de células basales es el tipo más común de cáncer de piel y suele aparecer en zonas de la piel expuestas al sol. La llaga puede ser roja, rosada o marrón, escamosa o con costra. El carcinoma de células escamosas es el segundo tipo más común de cáncer de piel y también suele aparecer en zonas de piel expuestas al sol. La úlcera puede ser roja, áspera y sangrar fácilmente. Las úlceras persistentes también pueden ser un signo de cáncer que se está propagando desde otras partes del cuerpo a la pierna.
Engrosamiento, aspereza o decoloración de la piel de las piernas.
Si un área de la piel de su pierna se vuelve más gruesa, áspera, escamosa o con costras, debe preocuparse por la posibilidad de cáncer de piel, especialmente cáncer de células escamosas. Además, en casos raros, la piel engrosada y con hoyuelos en las piernas puede ser un signo de la enfermedad de Paget de la mama, un cáncer poco común que afecta el pezón y la areola.
Si la piel de sus piernas adquiere un color rojo, morado, marrón o negro inusual que no está relacionado con una lesión, debe consultar a un médico de inmediato. Los cambios en el color de la piel pueden ser un signo de cáncer de piel, especialmente melanoma. Además, el sarcoma de Kaposi, un cáncer poco común que causa lesiones rojas o púrpuras en la piel, también puede causar decoloración de la piel.
Hinchazón de un lado o una pierna
La hinchazón de una pierna o de la parte inferior de la pierna puede ir acompañada de dolor, sensación de plenitud, malestar, piel brillante, calor o enrojecimiento. La causa de la hinchazón podría ser una trombosis venosa profunda (TVP), una afección en la que se forma un coágulo de sangre en una vena profunda de la pierna, lo que causa hinchazón, dolor y posiblemente lleve a complicaciones peligrosas como una embolia pulmonar. Sin embargo, la hinchazón en una pierna también puede ser un signo de cáncer, especialmente cáncer linfático, cáncer de tejidos blandos o cáncer metastásico que comprime los vasos sanguíneos.
Hinchazón en los pies o tobillos.
La hinchazón en los pies o los tobillos que no tiene explicación, no desaparece con el descanso y deja una marca al presionarla puede ser un signo de insuficiencia cardíaca, enfermedad renal o cáncer. La insuficiencia cardíaca es una afección en la que el corazón no bombea sangre de manera eficaz, lo que provoca que la sangre se acumule en las extremidades inferiores. La enfermedad renal también puede causar edema porque el cuerpo no puede eliminar el exceso de líquido. El cáncer, especialmente el cáncer linfático o metastásico, también puede causar hinchazón en las piernas.
Dolor
El dolor de piernas es un síntoma común que puede ser causado por muchas cosas, desde problemas musculoesqueléticos hasta trastornos neurológicos. Sin embargo, si experimenta dolores e molestias inusuales e inexplicables, esté alerta a la posibilidad de cáncer.
El dolor persistente, sordo o intenso que no se alivia con reposo o analgésicos comunes puede ser un signo de cáncer de huesos o de tejidos blandos. El cáncer óseo primario o el cáncer que se ha propagado a los huesos puede causar dolor óseo, especialmente un dolor que aumenta durante la noche. El sarcoma de tejidos blandos también puede causar dolor en las piernas, especialmente cuando el tumor crece lo suficiente como para presionar los nervios.
Fuente: https://giadinh.suckhoedoisong.vn/6-thay-doi-tren-chan-ngo-binh-thuong-lai-la-dau-hieu-cua-ung-thu-it-nguoi-biet-172241212200143523. htm
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