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| El superyate Scheherazade de 700 millones de dólares. (Fuente: DailyMail) |
El Tribunal Superior Anticorrupción de Ucrania (HACC) ha confirmado una demanda presentada por el Ministerio de Justicia del país en relación con la nacionalización de los activos del oligarca ruso Eduard Khudaynatov, que había sido sancionado anteriormente.
El comunicado correspondiente fue emitido por el Servicio de Seguridad de Ucrania (SSU).
En consecuencia, el comunicado de la HACC decía: “El 100% de las acciones del multimillonario Khudaynatov en el capital autorizado de Alliance-Ukraine Oil Company LLC fueron devueltas a Ucrania, con un valor estimado de unos 500 millones de UAH”.
Según los documentos de la investigación, el oligarca ruso Khudaynatov controlaba la compañía comercializadora de petróleo ucraniana a través de una serie de compañías offshore ( una compañía registrada en territorios donde reciben exención fiscal total si la compañía opera con ganancias provenientes fuera de ese territorio) y otras entidades controladas.
Al tomar el control del activo, el multimillonario petrolero ruso Khudaynatov esperaba evitar que sus activos de petróleo y gas en Ucrania fueran nacionalizados cuando Moscú lanzó una operación militar especial, y al mismo tiempo generar importantes ganancias del mercado energético en el vecino país de Europa del Este.
Sin embargo, el Servicio de Seguridad de Ucrania ha determinado quién es el verdadero propietario beneficiario de la empresa comercializadora de petróleo ucraniana Alliance-Ukraine Oil Company LLC.
La investigación también determinó que el multimillonario Khudaynatov era uno de los representantes de confianza del presidente Putin. Está a cargo de la compañía rusa de petróleo y gas NNK-Group y fue miembro del consejo directivo del gigante de petróleo y gas Rosneft, una compañía cuyo capital mayoritario es propiedad del gobierno ruso.
Según la SSU, las empresas mencionadas son importantes patrocinadores de la campaña militar del Kremlin en Ucrania. Ucrania acusa a estas empresas de suministrar continuamente combustible y petróleo a la industria de defensa, así como a las unidades militares de Rusia. Transfieren miles de millones de rublos al presupuesto de Moscú cada mes.
Por ello, contra el oligarca ruso se está llevando a cabo una investigación de acuerdo con el procedimiento penal iniciado por los investigadores de la SSU en virtud de la Parte 4 - Artículo 110-2 del Código Penal de Ucrania - sobre la financiación de acciones dirigidas contra Ucrania.
En febrero de 2023, a raíz de una demanda presentada por la SSU, el Tribunal Superior Anticorrupción de Ucrania confirmó la solicitud del Ministerio de Justicia del país de transferir las empresas propiedad de otro multimillonario ruso, Oleg Deripaska, a propiedad estatal ucraniana. El valor total de los activos transferidos a Ucrania es de aproximadamente más de 10 mil millones de UAH.
El nombre del magnate petrolero ruso Eduard Khudainatov recibió poca atención en comparación con otros oligarcas rusos hasta 2022, cuando su nombre apareció repentinamente en una demanda para determinar qué oligarca ruso era el verdadero propietario del superyate Amadea, valorado en 325 millones de dólares , que Estados Unidos declaró incautado.
Los funcionarios estadounidenses acusan al multimillonario Khudainatov de ser un sustituto. Afirman que el yate Amadea en realidad pertenece a uno de los magnates más ricos de Rusia: el magnate del oro Suleiman Kerimov, quien está bajo sanciones occidentales.
Además, Estados Unidos también ha cuestionado si Khudainatov puede estar actuando como fiador del propietario de otro superyate más valioso: el Scheherazade de 700 millones de dólares , que fue confiscado en Toscana, Italia, después del estallido del conflicto entre Rusia y Ucrania. Se cree que el verdadero propietario de este barco también está sujeto a sanciones occidentales.
Las autoridades estadounidenses admitieron en un informe de investigación que el multimillonario ruso Khudainatov también es muy rico, pero “no hay base” para creer que tenga los recursos financieros para comprar los superyates Amadea y Scheherazade.
Hasta ahora, el magnate Eduard Khudainatov no había sido sancionado por ningún país. Pero más tarde, este personaje también fue incluido en la lista negra de la Unión Europea (UE) por haberse beneficiado de la principal compañía petrolera de Rusia. La UE acusó al empresario de unos 60 años de “beneficiarse del gobierno ruso” y de tener estrechos vínculos con el Kremlin. También se dice que es el “propietario documental” de los dos yates confiscados.
Fuente
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