Vista del puerto de carga de Long Beach, California (EE.UU.). (Foto: AFP/VNA)
El 7 de abril, el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, dijo que su administración impondría un arancel adicional del 50% a los productos procedentes de China si el país no retiraba su arancel de represalia del 34% sobre Estados Unidos.
El presidente Trump tuiteó que la fecha límite para reducir los aranceles era el 8 de abril y que si China no lo hacía, los aranceles adicionales de su administración (que elevarían la tasa arancelaria total por encima del 100%) entrarían en vigor al día siguiente.
En Truth Social, el Sr. Trump declaró: «Ayer, China impuso un arancel de represalia del 34%, que se suma a sus aranceles récord, barreras no arancelarias, subsidios corporativos ilegales y una manipulación cambiaria masiva y prolongada, a pesar de mi advertencia de que cualquier país que tome represalias contra Estados Unidos con aranceles adicionales, más allá de los abusos arancelarios de larga data que ya han impuesto a nuestro país, enfrentará de inmediato nuevos aranceles sustancialmente más altos, muy por encima de los impuestos originalmente».
Por lo tanto, si China no retira el aumento del 34% sumado a sus abusos comerciales de larga data antes de mañana, 8 de abril de 2025, Estados Unidos impondrá un arancel ADICIONAL del 50% a China, a partir del 9 de abril.
¡Además, se terminarán todas las negociaciones con China respecto a las reuniones que solicitan con nosotros! "Las negociaciones con los demás países que también han solicitado reuniones comenzarán de inmediato".
Sobre las importaciones procedentes de China, el Sr. Trump dijo en un anuncio la semana pasada que Estados Unidos comenzaría a imponer un arancel del 34%, que se sumaría al arancel del 20% que ha impuesto a China desde que asumió su segundo mandato el 20 de enero.
También el 7 de abril, Trump descartó la posibilidad de suspender los aranceles recientemente anunciados, pese a que han sacudido la economía global.
En declaraciones a la prensa en la Casa Blanca, el presidente estadounidense afirmó: "No estamos considerando eso. Tenemos muchos, muchos países que vienen a negociar acuerdos con nosotros", al tiempo que enfatizó que cualquier acuerdo de ese tipo tendría que ser "justo".
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