Los agricultores que piden más subvenciones, menos trámites burocráticos y costes más bajos están acampando en las carreteras que rodean París. Representan el mayor desafío para el primer ministro Gabriel Attal desde su nombramiento hace menos de un mes. Intentó disipar sus preocupaciones en un amplio discurso político pronunciado el martes ante la Asamblea Nacional francesa.
Los agricultores pasan la noche en una barrera de la autopista en Aix-en-Provence, sur de Francia, el martes 30 de enero de 2024. Foto AP
“Necesitamos escuchar a los agricultores que están trabajando y están preocupados por su futuro y sus medios de vida”, dijo el Sr. Attal. “El objetivo es claro: garantizar una competencia justa, en particular para que las normas que se aplican a los agricultores franceses se apliquen también a los productos extranjeros”. La protección contra las importaciones baratas es una de las principales reivindicaciones de los manifestantes.
El Sr. Attal prometió ayuda de emergencia a los productores de vino en dificultades y pagos rápidos de los subsidios de la UE a otros. También dijo que los minoristas de alimentos que no cumplan con la ley, que tiene como objetivo garantizar una distribución justa de los ingresos para los agricultores, serán penalizados de inmediato.
Los agricultores que duermen en una autopista cerca de Disneyland, en el este de París, dudan de que el gobierno esté haciendo lo suficiente para ayudarlos. Asaron salchichas, instalaron televisores para ver el discurso del Primer Ministro y colgaron una efigie de un granjero moribundo de un puente.
Stéphane Chopin, un criador de carne de res Charolais orgánica cerca de Château-Thierry, al noreste de París, describió los costos y las cargas de intentar mantener prácticas orgánicas mientras se compite con alimentos de otros países con costos de mano de obra y de vida más bajos.
El movimiento en Francia es otra manifestación de una crisis alimentaria mundial agravada por la guerra total que ya dura casi dos años entre Rusia y Ucrania, un importante productor de alimentos.
Los agricultores franceses afirman que el aumento de los precios de los fertilizantes, la energía y otros insumos para el cultivo y la cría de ganado ha afectado sus ingresos.
El presidente francés, Emmanuel Macron, se reunirá el jueves en Bruselas con el presidente de la Comisión Europea para tratar la crisis agrícola .
Mai Van (según AP)
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