(Dan Tri) - Rusia y Ucrania se enfrentan en un "ojo por ojo" con ataques a gran escala con misiles y aviones no tripulados para obtener una ventaja antes de que el presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump, asuma el cargo.
El incendio arrasa un depósito de petróleo de la base aérea rusa Engels después de un gran ataque de Ucrania (Foto: X).
El presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump, se ha comprometido a poner fin a los combates rápidamente, pero ha habido pocos detalles sobre cómo lo logrará. Mientras tanto, Moscú y Kiev buscan ganar ventaja en el campo de batalla antes de posibles conversaciones negociadas por Trump.
En la noche del 13 de enero y la madrugada del 14 de enero, Ucrania llevó a cabo el mayor ataque jamás realizado con misiles ATACMS de largo alcance y vehículos aéreos no tripulados contra territorio ruso.
El ejército de Ucrania afirmó que las instalaciones militares y petroleras rusas fueron el objetivo de su última ofensiva, y agregó que tales ataques continuarán "hasta que Rusia detenga sus actividades contra Ucrania".
Según blogueros militares rusos, Moscú derribó más de 200 vehículos aéreos no tripulados ucranianos y 5 misiles ATACMS.
Un día después, Rusia respondió con un bombardeo a gran escala del sector energético de Ucrania.
Según el líder ucraniano, Volodymyr Zelensky, Rusia utilizó más de 40 misiles y más de 70 vehículos aéreos no tripulados en este ataque. De estos, el sistema de defensa aérea ucraniano derribó con éxito 30 misiles.
"Otro gran ataque ruso. Estamos en pleno invierno y el objetivo de Rusia sigue siendo nuestro sector energético. Los objetivos incluyen infraestructuras de gas e instalaciones energéticas", afirmó Zelenski.
El ataque obligó a la empresa energética estatal de Ucrania, Ukrenergo, a cortar temporalmente el suministro eléctrico, una medida necesaria para evitar el colapso del sistema energético.
Los ataques de represalia por parte de Rusia y Ucrania han aumentado tanto en escala como en frecuencia a medida que se acerca la toma de posesión del presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump (el 20 de enero).
Durante la campaña electoral, Trump afirmó que podía poner fin a este conflicto de tres años en sólo 24 horas. Sin embargo, él y su equipo admitieron recientemente que podría llevar meses.
Ha habido señales de cómo el equipo de Trump planea resolver el conflicto, pero esos planes están lejos de ser claros. Según algunas fuentes, Trump parece estar siguiendo un plan para congelar el conflicto, obligando a Rusia y Ucrania a hacer ciertos compromisos.
Durante una audiencia en el Senado el 15 de enero, Marco Rubio, el candidato de Trump para Secretario de Estado, dijo que Rusia y Ucrania necesitan hacer concesiones para poner fin a la guerra.
“Es importante que todos sean realistas: tanto Rusia como Ucrania tendrán que hacer concesiones. También es importante que haya un cierto equilibrio entre las dos partes”, afirmó.
Según él, es difícil para Ucrania recuperar completamente su territorio, y también es difícil para Rusia conquistar toda Ucrania.
Él cree que ambas partes tienen influencia que podría fortalecer sus posiciones en posibles conversaciones de paz. Subrayó que la próxima administración estadounidense aplicará una "diplomacia audaz" para poner fin al conflicto.
Fuente: https://dantri.com.vn/the-gioi/nga-ukraine-tan-cong-du-doi-lan-nhau-truoc-ngay-ong-trump-nham-chuc-20250116080329464.htm
Kommentar (0)