La oficina del primer ministro iraquí, Mohammed Shia al-Sudani, emitió un comunicado el 3 de febrero diciendo que 16 personas murieron, incluidos civiles, y otras 25 resultaron heridas en un ataque aéreo estadounidense contra objetivos proiraníes en Irak en la noche del 2 de febrero.
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| El bombardero de largo alcance B-1 fue uno de los vehículos desplegados en los ataques aéreos contra objetivos en Irak y Siria. Ilustración: Fuerza Aérea de EE.UU. (Fuente: Fuerza Aérea de Estados Unidos) |
En un comunicado, la oficina del primer ministro Al Sudani condenó el ataque como "un nuevo acto de agresión contra la soberanía de Irak". El comunicado también negó que el ataque hubiera sido coordinado previamente por Bagdad y Washington, afirmando que esa información era "mentira".
Según el comunicado, la presencia de la coalición militar liderada por Estados Unidos en la región “se ha convertido en una amenaza a la seguridad y la estabilidad en Irak, y en un pretexto para justificar el arrastre de Irak hacia conflictos regionales e internacionales”.
Ese mismo día, el Ministerio de Asuntos Exteriores de Irán condenó los ataques aéreos estadounidenses de la noche del 2 de febrero contra objetivos en Irak y Siria por "violar la soberanía y la integridad territorial" de esos dos países.
El portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores iraní, Nasser Kanaani, dijo que los ataques fueron un error estratégico de Estados Unidos y que sólo conducirían a mayores tensiones e inestabilidad en la región.
En la noche del 2 de febrero, el ejército estadounidense llevó a cabo múltiples ataques aéreos contra más de 85 objetivos en Irak y Siria relacionados con el Cuerpo de la Guardia Revolucionaria Islámica de Irán (CGRI) y sus grupos de milicias, en represalia por un ataque con drones a una base militar en Jordania el fin de semana pasado que mató a tres soldados estadounidenses.
En un desarrollo relacionado, la agencia de noticias Reuters citó a fuentes de seguridad que confirmaron que no hubo ningún ataque a la base aérea estadounidense de al-Harir en Irak después de que el grupo de milicianos de la Resistencia Islámica iraquí anunciara que tenía como objetivo la instalación.
Anteriormente, el 2 de febrero, el ejército estadounidense llevó a cabo múltiples ataques aéreos en Irak y Siria contra más de 85 objetivos vinculados al Cuerpo de la Guardia Revolucionaria de Irán (CGRI) y grupos de milicias respaldados por el CGRI en represalia por un ataque con aviones no tripulados el fin de semana pasado en el noreste de Jordania que mató a tres soldados estadounidenses.
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