Las fuertes lluvias de los últimos días han arrasado muchos vehículos y destruido muchas estructuras y carreteras en los estados de Uttarakhand y Himachal Pradesh, en el norte de la India. El estado de Himachal Pradesh es el más afectado.
El ministro principal de Himachal Pradesh, Sukhvinder Singh Sukhu, dijo que al menos 16 personas habían muerto en el estado en las últimas 24 horas, incluidas nueve víctimas del derrumbe de un templo en la capital del estado, Shimla. Las autoridades locales están trabajando para limpiar los escombros y rescatar a aquellos que aún están atrapados. Aconsejó a la gente quedarse en casa y evitar acercarse a los ríos.
Los funcionarios estatales han ordenado el cierre de muchas escuelas e instalaciones educativas. Las personas en zonas peligrosas fueron evacuadas a refugios seguros.
Según el Departamento Meteorológico de la India, muchas zonas del estado de Himachal Pradesh registraron hasta 273 mm de lluvia en 24 horas.
En el vecino estado de Uttarakhand, los equipos de rescate están trabajando arduamente para cavar en el barro mientras se teme que decenas de personas estén atrapadas después de que las fuertes lluvias provocaron deslizamientos de tierra. Al menos ocho personas han muerto en el estado desde el 11 de agosto.
La temporada de los monzones aporta el 80% de las precipitaciones anuales de la India y abastece de agua a la agricultura y al sustento de millones de personas. Sin embargo, las fuertes lluvias que provocaron deslizamientos de tierra e inundaciones también provocaron graves daños a personas, propiedades y cultivos.
Los expertos dicen que el cambio climático está aumentando la intensidad y frecuencia de estos fenómenos meteorológicos extremos.
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