El 25 de junio se impuso un toque de queda en dos ciudades del norte de Honduras, luego de que más de 20 personas fueran asesinadas a tiros desde la noche del 24 de junio.
Una serie de tiroteos en dos ciudades de Honduras, Choloma y San Pedro Sula, dejaron un total de 22 personas muertas y muchas heridas. (Fuente: CGTN) |
El señor Edgardo Barahona, portavoz de la policía hondureña, informó que la noche del 24 de junio un grupo de personas abrió fuego en un club de billar de la ciudad industrial de Choloma, matando a un total de 11 personas y dejando gravemente heridas a otras 3.
Mientras tanto, en la región del Valle de Sula, en el norte de Honduras, otras 11 personas murieron en una serie de tiroteos en la importante ciudad industrial de San Pedro Sula.
Poco después, la presidenta hondureña, Xiomara Castro, declaró un toque de queda de 15 días en la ciudad de Choloma, a partir del 25 de junio, desde las 21:00 horas del día anterior hasta las 4:00 horas de la mañana siguiente (hora local).
El toque de queda en la ciudad de San Pedro Sula entró en vigor el 4 de julio. El Gobierno hondureño ha movilizado todas sus fuerzas para investigar y esclarecer los hechos mencionados.
Además, el gobierno hondureño también ofreció una recompensa de 800.000 lempiras (unos 32.707 dólares) para capturar a los sospechosos que perpetraron el tiroteo en la ciudad de Choloma.
Desde diciembre del año pasado, con el fin de evitar la escalada de violencia, el gobierno hondureño comenzó a declarar el estado de emergencia en algunas localidades.
La violencia de pandillas es actualmente uno de los principales problemas en Honduras. Junto con sus vecinos El Salvador y Guatemala, Honduras forma el “triángulo de la muerte” en Centroamérica, donde bandas asesinas controlan el narcotráfico y el crimen organizado.
Esta es también la razón principal por la que el número de muertes en Honduras se ha disparado, con una tasa de 40 asesinatos por cada 100.000 personas el año pasado, cuatro veces más alta que el promedio mundial.
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