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La Cumbre del Grupo de los Siete (G7) se inauguró oficialmente con la visita de los líderes del G7 al Museo Memorial de la Paz de Hiroshima.
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| Los líderes del G7 visitan el Museo Memorial de la Paz de Hiroshima. Foto: NIKKEI ASIA |
Esta es la primera vez que todos los líderes del G7, incluidas las tres potencias nucleares, Estados Unidos, Reino Unido y Francia, visitan el museo juntos.
No es casualidad que se eligiera la ciudad de Hiroshima como sede de esta conferencia. El bombardeo atómico de Hiroshima dejó un recuerdo inolvidable para los habitantes de la ciudad, así como para el primer ministro japonés, Fumio Kishida.
El Museo Memorial de la Paz de Hiroshima es un lugar que conserva las huellas de las consecuencias del bombardeo atómico estadounidense sobre la ciudad del oeste de Japón el 6 de agosto de 1945.
Como fuerza impulsora detrás de la decisión de celebrar la cumbre aquí, el Primer Ministro Kishida destacó la necesidad de que los líderes del G7 sean testigos de primera mano de las consecuencias del uso de bombas atómicas en un contexto en el que el impulso hacia un mundo sin armas nucleares todavía es débil.
Aunque el mundo ha avanzado mucho en la prevención de la proliferación de armas nucleares, la realidad es que todavía existen muchas amenazas potenciales derivadas de este tipo de armas de destrucción masiva. El proceso de reducción de las armas nucleares en el mundo se desarrolla muy lentamente y las potencias poseedoras continúan modernizando sus sistemas de armas nucleares.
Con la ambición de lograr un mundo sin armas nucleares, uno de sus principales objetivos políticos, el Primer Ministro Kishida ha fijado la cuestión del desarme nuclear como el tema principal de la agenda de esta Cumbre del G7, considerándolo el punto de partida de todos los futuros esfuerzos de desarme nuclear.
En lugar de aspirar al desarme nuclear en un solo paso, un primer paso realista podría ser un compromiso de no desplegar esas armas durante esta conferencia, dijo Kishida. En un discurso pronunciado en enero en Washington, el primer ministro Fumio Kishida subrayó que el mundo no debe dar por sentado el hecho de que no se han utilizado armas nucleares en 77 años.
El mundo está asistiendo a grandes crisis que sacuden los cimientos del orden internacional. El objetivo principal de esta conferencia es fortalecer el orden internacional basado en el estado de derecho, demostrar una firme determinación de proteger este orden y oponerse al uso de armas nucleares y al uso de la fuerza para cambiar el statu quo.
En vista de que muchos países amenazan con desarrollar armas nucleares, la ubicación de Hiroshima es vista como una oportunidad simbólica para que el G7 se una para pedir el desarme y el no despliegue de armas nucleares.
La ciudad de Hiroshima también pide la abolición de las armas nucleares y, al mostrar el legado del “espíritu de Hiroshima”, la Tierra del Sol Naciente también espera que, además del mensaje de un mundo pacífico sin armas nucleares, la cocina local y la cultura tradicional sean ampliamente conocidas tanto en Japón como en el extranjero.
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