No todo el mundo está de acuerdo con la carta abierta del Future of Life Institute que pide una moratoria a la investigación en inteligencia artificial (IA), firmada por algunos de los nombres más destacados de la industria tecnológica.
La carta, con más de 31.000 firmas, entre ellas las del CEO de Tesla, Elon Musk, y el cofundador de Apple, Steve Wozniak, pide al mundo que detenga el desarrollo de modelos de IA más grandes que GPT-4, la versión más potente detrás de la aplicación ChatGPT.
La carta incluso sugiere que, si “no se puede promulgar rápidamente una moratoria, los gobiernos deberían intervenir e imponer una prohibición formal”.
Contrariamente a lo anterior, Alex Karp, CEO de Palantir (una empresa tecnológica que todo Silicon Valley "odia"), dijo en una entrevista el 8 de junio que "mucha gente exige una pausa en el desarrollo de IA porque no tienen ningún producto en sus manos".
Sin mencionar nombres específicos, el CEO de Palantir dijo: “La gente que no tiene nada que aportar a la investigación en IA” está intentando detener el desarrollo de esta tecnología para poder “robar” el liderazgo en aplicaciones comerciales y militares.
Cuando se le preguntó si la carrera de la IA es similar a la carrera armamentista de la Guerra Fría, Karp dijo: "La carrera ya está en marcha, y desacelerar no la detiene".
El punto de inflexión en la tendencia de la IA no son los grandes modelos de lenguaje como GPT-4, sino cómo se utiliza la IA en aplicaciones militares.
En diciembre de 2022, The Times reveló que la tecnología de Palantir había ayudado a Ucrania a aumentar la precisión, la velocidad y la letalidad de sus ataques de artillería a pesar de ser en una escala mucho menor que Rusia.
Palantir Technologies, fundada en 2003, vende software de análisis de datos a gobiernos, organizaciones militares y privadas. Esto ha llevado a que se les acuse frecuentemente de estar detrás de violaciones de la privacidad de los usuarios.
(Según CNBC)
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