El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, y el presidente chino, Xi Jinping, en una reunión previa (Foto: Reuters).
El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, y el presidente chino, Xi Jinping, se reunirán en el marco de la cumbre de Cooperación Económica Asia-Pacífico (APEC) en San Francisco, Estados Unidos, programada para comenzar el 14 de noviembre.
Según fuentes, los preparativos para la reunión entre ambos líderes se están completando gradualmente.
Hay pocas expectativas de que se produzca algún avance entre los dos países en esta cumbre debido a problemas de larga data en las negociaciones. Sin embargo, según los expertos, esta esperada reunión podría ser una buena señal para la relación entre Estados Unidos y China y enviar un mensaje positivo a los países de la región de que las dos economías más grandes del mundo están haciendo esfuerzos para resolver las diferencias y reducir las tensiones.
La Casa Blanca confirmó el 31 de octubre que ambos líderes se reunirán en San Francisco. La secretaria de prensa, Karine Jean-Pierre, dijo que se espera que el presidente Biden tenga una “conversación difícil… pero importante” con el líder chino.
La confirmación estadounidense se produjo después de las conversaciones de la semana pasada entre el principal diplomático chino, Wang Yi, y funcionarios clave en Washington, incluido el secretario de Estado Antony Blinken y el asesor de seguridad nacional Jake Sullivan. Los funcionarios acordaron "realizar esfuerzos conjuntos para lograr un encuentro" entre los dos jefes de Estado.
Estados Unidos será anfitrión de la conferencia de la APEC en San Francisco a partir del 11 de noviembre. Antes de la reunión prevista entre los dos líderes estadounidense y chino al margen de esta reunión, el ministro de Relaciones Exteriores de China, Wang Yi, también se reunió con el presidente Biden durante su visita de tres días a Washington la semana pasada.
Pero según un comunicado del Ministerio de Relaciones Exteriores de China, Wang Yi advirtió que "el camino hacia la cumbre de San Francisco no será fácil" y que los dos países "no pueden confiar en el piloto automático" para que esto suceda.
¿No es un gran avance?
Los observadores diplomáticos siguen siendo en gran medida pesimistas sobre la cumbre, que es la primera conversación cara a cara entre líderes chinos y estadounidenses en un año.
"No espero un gran avance. No espero un gran deshielo", dijo el politólogo Chong Ja Ian de la Universidad Nacional de Singapur. También expresó su esperanza de que ambas partes intenten comprender mejor los puntos de vista de la otra y expresó su deseo de seguir dialogando.
“Probablemente habrá expectativas comunes más estables y habrá más diálogo para reducir los conflictos y los riesgos”, añadió.
Las relaciones entre las dos potencias mundiales se han deteriorado rápidamente en 2022, pero ambas partes han realizado esfuerzos para mejorar la comunicación y aumentar la cooperación en los últimos meses, y altos funcionarios estadounidenses han realizado repetidos viajes a China.
La semana pasada, un grupo de trabajo económico integrado por funcionarios de ambos países celebró su primera reunión en un esfuerzo por resolver las tensiones.
“Podrían tratarse diversos temas cuando los líderes se reúnan”, dijo David Arase, profesor del Centro Hopkins-Nanjing de Estudios sobre China y Estados Unidos. El profesor espera que ambas partes pidan la liberación de rehenes y ayuda humanitaria para los ciudadanos de Gaza, y acuerden trabajar para reducir las tensiones en la región del Indo-Pacífico. “Las dos partes también tienen el potencial de promover la cooperación en áreas regionales no estratégicas como el cambio climático”, añadió.
Éstos fueron temas que el Ministro de Relaciones Exteriores, Wang Yi, planteó con funcionarios estadounidenses la semana pasada cuando intercambiaron puntos de vista sobre el conflicto en curso en el Medio Oriente y la guerra en Ucrania.
Arase también espera que Washington intente presionar a Pekín para que presione a Rusia, Corea del Norte e Irán en cuestiones relacionadas con Estados Unidos. Mientras tanto, es probable que Pekín exija el levantamiento de las sanciones económicas impuestas por Washington a China. Pero los esfuerzos pueden no ser muy efectivos, dijo.
La reunión entre Xi y Biden podría no arrojar grandes resultados, dijo, “pero podría reabrir las líneas regulares de discusión y consulta destinadas a prevenir tensiones preocupantes y una creciente hostilidad en la relación bilateral”.
Mientras tanto, el profesor asociado Alfred Wu de la Escuela de Políticas Públicas Lee Kuan Yew de la Universidad Nacional de Singapur dijo que los temas que discutirán el Sr. Xi y el Sr. Biden dependen del tiempo asignado para la cumbre.
Cuando los dos líderes se reunieron por última vez en el marco de la cumbre del G20 en Indonesia en noviembre de 2022, mantuvieron tres horas de conversaciones sobre temas que abarcaban desde Taiwán hasta Corea del Norte. Por lo tanto, el Sr. Wang Huiyao, fundador del centro de estudios con sede en Beijing Centro para China y la Globalización, dijo que la próxima cumbre será muy significativa, especialmente para los países de las regiones de Asia Oriental y el Sudeste Asiático.
Los líderes de la región han pedido desde hace tiempo relaciones más estables entre Estados Unidos y China y han expresado crecientes preocupaciones por tener que elegir bando en la intensificación de la rivalidad entre superpotencias.
"Una simple foto de los dos líderes estrechándose la mano enviaría una gran señal al mundo exterior", dijo Wang, calificando la cumbre de "muy esperada". "El mundo necesita estabilidad y cuando los líderes de las dos economías más grandes se reúnan, estabilizará la economía mundial y enviará buenas señales al resto del mundo", añadió.
A medida que los preparativos para la cumbre se acercan a su finalización, un artículo en el Diario del Pueblo de Beijing destacó que China y Estados Unidos deben ir más allá de los conceptos de competencia y confrontación.
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